¡Qué felices serían las personas cortas de vistas si recuperan su alcance visual sin ningún tratamiento médico o sin tener que utilizar anteojos! Pues esto realmente sucede en la Iglesia Central Manmin por medio de la oración del Dr. Jaerock Lee. Le damos la gloria a Dios al ver a muchos ser sanados de astigmatismo, xeroftalmia, miopía e hipermetropía y por las muchas personas que han recuperado su sentido de la vista.


"¡Me siento feliz ya que fui sanada de xeroma, mala vista y hernia de disco cervical!"

Diaconisa Seonghee Ryu (Misión de Mujeres 2-4)


En la actualidad llevo una vida extremadamente feliz, llena del amor del Señor. Pero hace siete años atrás, comencé a lagrimear aun por una brisa ligera debido a xeroma; sequedad anormal de los ojos, por lo tanto, constantemente tenía que volver a maquillarme y esto era muy incómodo.

Desde que escuché que se realizarían las Reuniones Especiales de Sanidad, me preparé con gran anhelo en mi corazón y le ofrecí a Dios mañanas de ayuno. El 10 de junio, comencé a ver luces verdes y azules cuando el Dr. Jaerock Lee oró por los enfermos en el altar. Desde ese momento, los síntomas de sequedad en mis ojos desaparecieron y obtuve un buen alcance de la vista.

No podía leer letras pequeñas, y era muy difícil para mí enhebrar una aguja. En el mes de abril de este año, me sometí a un examen de la vista. El resultado mostró que tenía 0.3/0.5 de agudeza visual, astigmatismo e hipermetropía. Pero el 20 de mayo, a través de la oración del Dr. Lee, obtuve una mejor visión que se convirtió en 0.9/0.9 y también fui sanada de astigmatismo.

Además, Dios me sanó de hipermetropía durante las Reuniones Especiales de Sanidad Divina. El 17 de junio me hice nuevamente un examen de la vista y los resultados mostraron que tenía 1.2/1.2 de agudeza visual. ¡Aleluya!

También tenía mucha dificultad al dormir debido al grave dolor del cuello. Recibí masajes y tratamientos orientales, pero no funcionaron en lo absoluto; no podía reclinar mi cabeza para atrás ni tampoco a los lados.

El pasado mes de febrero, fui diagnosticada con hernia de disco cervical. El examen mostró que el 3er y 4to hueso del cuello, al reclinarse, presionaban el nervio, e incluso tenía un dolor severo en mi columna vertebral y en el cóccix. No obstante, fui sanada de ambas cosas el 20 de mayo por medio de la oración del Dr. Lee. Le doy toda la gloria a Dios el Padre quien me sanó por completo.


"¡Qué increíble! ¡Cuán claro y brillante se ve nuestro santuario!"

Hermano Heeyoung Yoon (Misión de los alumnos de 8vo grado)

Desde que era muy joven pasaba mucho tiempo usando la computadora. Era tan corto de vista que tuve que mantenerme cerca del monitor de mi computadora para poder usarla. Esto causó que mi agudeza visual comenzara a disminuir. Cuando me encontraba en 4to grado tenía una visión de 0.6/0.5, luego mi vista empeoró y disminuyó a 0.3/0.3.

Yo toco el bajo durante el Servicio de Adoración para los Estudiantes el sábado. Mi vista era tan mala que no podía leer la música, por esa razón debía memorizarla. No pude evitarlo, pero preferí tomar un asiento delantero en la escuela ya que cuando me sentaba en un asiento trasero tenía que pasar al asiento de adelante de todos modos para ver y tomar notas. A pesar de que mi vista era tan mala, no usaba lentes porque me dijeron que mi visión podía empeorar, y también porque era incómodo usarlos.

Sin embargo, el 10 de junio experimenté el gran amor del Señor durante la Reunión Especial de Sanidad Divina. Me arrepentí y me quebranté por completo durante la oración del Dr. Lee por los enfermos. Solía utilizar nombres malos para mis amigos, jugar malos juegos y ser arrogante debido a mi habilidad para tocar la guitarra más pronto que mis amigos, pero de todo esto me arrepentí.

En el momento que el fuego del Espíritu Santo vino a mi corazón, sentí que ese fuego subió a mis ojos, entonces los abrí. Todo a mi alrededor se veía tan claro. Cuando subí al altar para dar mi testimonio de sanidad, estaba lleno de gozo ya que el santuario, que antes apenas podía ver, estaba tan claro y brillante.

Anteriormente no podía ver la parte trasera del santuario, pero al verla me sentía que estaba en un santuario diferente. Le doy gracias al Señor por Su amor y gracia.


"¡Siento como si estuviera en un sueño porque después de 25 años puedo quitarme los anteojos!"

Diaconisa Bongsook Ko (Misión de Mujeres 1-4)

Durante 25 años, desde que estaba en la escuela secundaria, casi nunca me quitaba mis lentes. Un día mi hijo (Jaemin Kim de 11 años) pisó mis lentes y estos se rompieron.

En los días siguientes sufrí de mareos y fuertes migrañas ya que no usé mis lentes; no podía ni siquiera caminar bien, sentía como que el suelo hacía olas y se acercaba a mí, y caminaba en zigzag debido al astigmatismo. Mis lentes se apoyaban frecuentemente sobre mi rostro, por lo que continuamente mis mejillas se lastimaban.

Mientras tanto, escuché la buena noticia que el Pastor Principal, Dr. Lee, realizaría la Reunión Especial de Sanidad Divina, por lo tanto me preparé con gran anhelo en mi corazón. Comencé a despojarme de mis viejos hábitos, de la vagancia y de la maldad en mi corazón, tomando nota de ellos al descubrirlos.

El 10 de junio, durante la Reunión Especial de Sanidad Divina, pude ser llena con la plenitud del Espíritu Santo y un corazón agradecido mientras alababa a Dios. Mi hijo también se quebrantó ante Dios en el servicio.

Luego mi cuerpo comenzó a sentir calor cuando recibí la oración del Dr. Lee. Para mi sorpresa, mi hijo y yo comenzamos a recibir mejoría en nuestra vista.

Me quité mis lentes y los síntomas de la anemia desaparecieron por completo. Mi hijo se sintió muy feliz al contarme que pudo ver bien las letras sobre la pizarra de la escuela. Le doy toda la gloria a Dios el Padre.