«El voluntariado es una bendición y una prueba de mi amor»
Diaconisa mayor Susana Kim (46 años), Zona 17 (Corea del Sur) Ella fue voluntaria durante el Retiro de verano Manmin
Yo crecí en medio de una niñez sin dificultades. Tuve muchas amigas, pero en un rincón de mi corazón tuve una sed que no podía saciar con nada. Asistí a muchas iglesias grandes, pero nada calmaba mi sed. Aunque asistía a la iglesia no tenía la certeza de salvación ni de que iría al Cielo. No tenía paz ni gozo.
En mayo de 1998 mi hermana mayor, la diaconisa mayor Heesu Kim, me llevó a la reunión especial de avivamiento con el Dr. Jaerock Lee realizada en la Iglesia Central Manmin. Desde entonces mi vida como creyente comenzó a cambiar. A medida que escuchaba los sermones en la iglesia, encontraba las causas fundamentales de los problemas que enfrentaba. Yo escuché los sermones del Pastor Principal en casetes y leí sus libros. Ya que recibí mucha gracia, con diligencia me ofrecí como voluntaria en los eventos de la iglesia y ayudé en el caminar de las personas con dificultades.
Mientras tanto, el anciano Kangjun Lee me recomendó que fuera voluntaria a cargo de la seguridad de los miembros en los servicios y eventos de la iglesia. Los domingos fui voluntaria durante el Servicio Dominical Matutino, el Servicio Dominical Vespertino, el Servicio de la Misión Luz y Sal y muchos otros eventos.
En el año 2000 yo anhelaba ayudar a mi Pastor Principal quien dirige cruzadas internacionales solo con fe. En el momento ideal recibí la oportunidad de publicar las cruzadas en las áreas locales.
En aquellos días yo trabajaba para una agencia de entretenimiento. Para poder difundir las cruzadas yo debía solicitar un permiso de más de quince días. Dios conmovió el corazón de mi jefe y permitió que yo tomara vacaciones de período largo e incluso me pagó por ellas.
Antes de las cruzadas yo me quedaba en los países por quince días, o incluso por un mes. Desde temprano en la mañana hasta el atardecer yo repartía materiales publicitarios a las personas alrededor de las estaciones del metro, en las calles y en las casas. Al regresar a mi habitación y orar para terminar el día, yo me sentía muy feliz. Cuando veía el poder de Dios manifestado por el Pastor Principal en las cruzadas, me sentía muy emocionada y decidí trabajar fielmente.
El 25 de diciembre de 2010 vi el amor de Dios, del Señor y del pastor por Manmin. Me di cuenta de que lo que Dios anhela en realidad es hijos verdaderos con un corazón bueno y hermoso. Después, con una nueva resolución, yo comencé a resumir los mensajes del Pastor Principal como Los nueve frutos del Espíritu Santo, Las Bienaventuranzas y El capítulo del amor. Oré cada día para alcanzar el corazón que Dios anhela en realidad.
En el 2015 me esforcé por obedecer la voluntad de Dios que nos dice que nos gocemos siempre, oremos sin cesar y demos gracias por todo. En junio de 2015 tuve la bendición de alcanzar el corazón del espíritu. ¡Aleluya!
Estoy trabajando como líder de grupo de la Misión de Mujeres y líder del Grupo femenino de voluntarias de seguridad. También fui promovida como gerente de equipo en mi lugar de trabajo, Urim Asset Plus. Mi esposo me ayudó cada vez que yo deseaba ser voluntaria y él también ha recibido bendiciones en su negocio. Doy todas las gracias y gloria a Dios quien me ha bendecido en mi espíritu y cuerpo.
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